CARGA DE LA CABALLERÍA PESADA TEMPLARIA

CARGA DE LA CABALLERÍA PESADA TEMPLARIA

martes, 31 de julio de 2012

EPAGÓMENOS-CALENDARIO EGIPCIO

EPAGÓMENOS
Son los cinco días agregados al final de cinco meses del año, que pasan así de tener 30 a tener 31 días.  La luminosidad solar necesaria, para tales días,  sería la equivalente a arrebatar a cada día del calendario de 30 mensuales, 1/72 de su luminosidad habitual.
En cada uno de esos días nacieron las cinco deidades mitológicas egipcias.
Por tanto en el año:
360 días: 3+6=9
5 días epagómenos

lunes, 30 de julio de 2012

0TRA VEZ EL NÚMERO AUREUS

El número áureo es la relación entre el lado del pentágono regular y la recta que une dos vértices no consecutivos de éste.

LA DOCTRNA MONÁSTICA COPTA


 
Las Arcadas, las Ojivas, la Cúpula de Oro

        Construidas sólidamente las columnas en este templo o castillo espiritual, surgen casi por sí solas las Arcadas, las Ojivas y la Cúpula de Oro que lo glorifica y lo corona.
 

Arcadas

        PRIMERA: Te estudiarás en detenido examen cada día, como estudia el naturalista una flor, un insecto, una raíz, una piedrecilla, una gota de agua. 
        SEGUNDA: La vida armónica en común, es un ensayo en la tierra de lo que es la vida en los mundos de elevación. 
        TERCERA: Procura educar tus pensamientos, tus deseos y tu voluntad en forma que no discrepes jamás con el armónico conjunto de tus hermanos. 
        CUARTA: En la vida espiritual, el pesimismo es como la oruga venenosa que lentamente destruye los jardines en flor. Casi siempre nace de una soberbia oculta y sutil con apariencias de celo apostólico o deseo del bien general. 
        QUINTA: La paciencia que es necesaria para obtener éxito en los distintos aspectos del progreso humano, es aún más indispensable en la vida espiritual donde no se lucha con elementos tangibles y con fuerzas materiales, sino intangibles, invisibles e inmateriales.
        Eres un viajero eterno, ¡oh Kobda!, y necesitas llenar abundantemente tu odre de aceite que te baste hasta el final del viaje. Este aceite es la paciencia que suaviza todas las asperezas, y que hace girar regularmente los secretos rodajes y resortes de tu vida interior. Esta paciencia te es necesaria contigo mismo y mucho más con los seres con quienes convives y con los acontecimientos que, sin buscarlos, te ocurren.
        No debes irritarte contra ti mismo, cuando te ves vencido por tus pasiones y debilidades o caes en descuidos o faltas que quieres evitar, sino humillarte ante Dios y continuar de nuevo tu camino.
        No debes irritarte contra los demás cuando en un orden o en otro no responden a lo que tú esperas de ellos, y tranquilamente debes pensar que su evolución es escasa todavía, que son espíritus jóvenes y que si fueron puestos en tu camino será para que los ayudes y no para que, irritado, te apartes de ellos, con lo cual nada saldrías ganando, ni para tu progreso ni para el suyo.
        SEXTA: En los caminos espirituales, colectivos o en común, es peligroso el deseo febril de palpar el éxito si este deseo produce inquietud y perturbación de la paz y serenidad interior, porque esta perturbación e inquietud nos aleja del éxito en vez de acercarnos, y estorba grandemente el desarrollo de las facultades psíquicas.
        SÉPTIMA: Si fueres destinado a obras materiales aplícate a ellas con amor y desinterés.
        OCTAVA: Lo que has obtenido o realizado tú, debe ser para todos los que lo desean y se colocan en condiciones de comprenderlo y practicarlo. 
        NOVENA:  Las palabras tuyo y mío no existen en el vocabulario.
Las Ojivas

       Son  los ventanales por donde tu alma se asomará.

La Cúpula de Oro

               Es la capacidad que habrás adquirido para irradiar de ti la Bondad, la Luz, la Paz y el Amor Divino en tal forma, que seas como un desbordamiento de agua clara en medio de tus hermanos.
      

sábado, 28 de julio de 2012

ALFABETO COPTO

El alfabeto copto es una versión ligeramente modificada del alfabeto griego, con algunas letras propias demóticas utilizadas para representar varios sonidos no existentes en el alfabeto griego. Como lengua cotidiana tuvo su apogeo desde el siglo III hasta el siglo VI. En la actualidad perdura sólo como lengua litúrgica de la Iglesia Ortodoxa Copta.

LA SEPTUAGÉSIMA




Con las primeras Vísperas del primer Domingo de Septuagésima, iniciamos (en el Año Litúrgico tradicional) un período de semanas preparatorias al santo tiempo de Cuaresma.

-Con la finalidad de no llegar sin la adecuada preparación espiritual a la Cuaresma, la Iglesia instituyó la Septuagésima:
Los nombres de Septuagésima, Sexagésima, y Quinquagésima con que se distingue cada uno de estos tres domingos,, son derivados del de Quadragésima, con que los latinos designaron a la Cuaresma. "

Pero hay dos significados adicionales:

-Los setenta textos que forman el canon (libros sagrados) de la iglesia católica.
-La profecía de Daniel donde relaciona la septuagésima semana con la gran tribulación.

MONOFISISMO COPTO

El dogma definido en Calcedonia y mantenido por la Iglesia Ortodoxa y la Iglesia Católica sostienen que en Cristo existen dos naturalezas, la divina y la humana «sin separación» y «sin confusión». Sin embargo, el monofisismo mantiene que en Cristo existen las dos naturalezas, «sin separación» pero «confundidas», de forma que la naturaleza humana se pierde, absorbida, en la divina.

viernes, 27 de julio de 2012

IGLESIA DE SAN SERGIO Y BACO

 .

            Pero el lugar por antonomasia se halla en El Cairo, y más concretamente, en el llamado Barrio Copto, en la parte más céntrica y antigua de la gigantesca capital Se trata de la iglesia de San Sergio y Baco, construída, según la tradición, en el lugar en el que estaba la cueva en el que la Sagrada Familia terminó instalándose durante su estancia en Egipto, y donde José trabajó varios años para dar de comer a su familia. La cueva se halla a diez metros de profundidad y durante las crecidas el Nilo incuso se inunda. La iglesia fue construída en el s. IV, se incendió hacia el 750 y fue restaurada después.

miércoles, 25 de julio de 2012

SANTIAGO O PRISCILIANO EN EL DÍA DE SANTIAGO

Pocos saben la existencia de este personaje. Prisciliano era un hereje de los que surgieron a finales del S. IV después de Cristo. Una visión muy ecléctica y pagana del cristianismo
Prisciliano nació en Galicia en el año 340, preconizaba un cristianismo gnóstico y druídico mezclado con la astrología y el estudio bíblico a través de la técnica de numerología cabalística. Probablemente es él quien está enterrado en la Catedral de Santiago de Compostela.

CRUZ COPTA


La Cruz Egipcia, Ansada, o de Tau Enlazada, con su brazo superior en forma de curva cerrada sobre una cruz  Tau, es símbolo de la inmortalidad.. Simboliza a la vez al cosmos y al hombre. Referida a la creación, representa al sol, principio vital, fecundando la tierra, la materia (brazo horizontal), y proyectado hacia el infierno, lo espiritual (brazo vertical).
Entre los primeros cristianos egipcios (coptos)  se empleó como alegoría de la vida eterna conseguida gracias al sacrificio de Cristo.

CRUZ COPTA ORTODOXA

CRUZ COPTA ORTODOXA

martes, 24 de julio de 2012

LOS COPTOS. SU SIGNIFICADO Y ORÍGENES


La Iglesia Copta fue fundada en Egipto en el siglo I. La palabra copto significa "egipcio".

Según la tradición, la Iglesia Copta tiene su origen en las predicaciones  de San Marcos, autor del Segundo Evangelio en el siglo I, que llevó el cristianismo a Egipto en la época del emperador Nerón. 

Se separaron del resto de las iglesias en el Concilio de Calcedonia, en el año 451.

domingo, 22 de julio de 2012

LOS VALDENSES



PEDRO WALDO Y LOS VALDENSES El movimiento evangélico de la Edad Media recibió un valioso refuerzo con la conversión de Pedro Waldo debido, a la impresión que le produjo la muerte repentina de un amigo con el cual estaba conversando. Dicho incidente hizo que este rico comerciante, dejando sus negocios, pensara solo en la salvación de su alma.

Un sacerdote a quien preguntó sobre el asunto le respondió que había varias maneras de salvar el alma, pero que la más segura era poner en práctica las palabras de Jesús al joven rico: -Si quieres ser perfecto, vende todo lo que tienes y dalo a los pobres. Se cree que el cura lo dijo con ironía, por que Waldo era un hombre muy rico; pero éste, que estaba decidido a conseguir la salvación a todo coste, lo cumplió al pie de la letra. Su gran acierto fue que, en lugar de ir a profesar el voto de pobreza en un convento, resolvió deshacerse de sus bienes, empleándolos él mismo para beneficio de los pobres y la extensión del Reino de Dios.

Consideró que era una obra muy buena a los ojos de Dios el mandar traducir y poner en manos del pueblo las Sagradas Escrituras. Hizo escribir a mano muchas copias que eran llevadas por cristianos fieles de un pueblo a otro.

El clero empezó a mirar con recelo a aquellos hombres humildes que, de dos en dos, descalzos y pobremente vestidos, con el volumen sagrado en la mano, iban predicando la Palabra de Dios, y el arzobispo Guichard les prohibió predicar.

 Pedro Waldo apeló al papa esperando que su justa causa sería reconocida, y compadeció con uno de sus colaboradores ante el Concilio de Letrán en marzo del año 1179, El papa los trató amablemente pensando que los pobres de Lyon, como les llamaban, permanecerían dentro de la Iglesia Católica, quedando convertidos en una orden monástica y, según testimonios que tenemos de sus jueces, los hallaron muy piadosos y austeros en su modo de vivir, pero ignorantes -según ellos- e incapaces de predicar. Esto fue porque, en lugar de examinarlos sobre las Sagradas Escrituras y las doctrinas más claras y evidentes del Cristianismo, les interrogaron, en Lenguaje filosófico, sobre la Santísima Trinidad, las dos naturalezas de Cristo, y otras cosas que los Concilios habían tratado de resolver y establecer como dogmas. Vueltos a Lyon, resolvieron que debían predicar el Evangelio con sencillez, porque era menester obedecer a Dios antes que a los hombres, y se lanzaron a la obra, desafiando la persecución.
 El edicto de excomunión que se extendió contra ellos en el año 1181 les obligó a salir de Lyon, lo que fue tan beneficioso para su causa de como lo había sido la primera persecución que sufrió la iglesia cristiana de Jerusalén, la cual obligó a los primeros cristianos a extenderse por todo el mundo conocido.

Pedro Waldo  huyendo de las persecuciones llegó hasta  la misma frontera de Rusia donde murió el año 1217 después de cincuenta y siete años de actividad.

sábado, 21 de julio de 2012

EL SELLÓ DE SALOMÓN



En aquella época se pensaba que estos dibujos protegían a su portador del 


influjo de demonios y espíritus maléficos, o simplemente de la mala suerte


También era frecuente grabar este símbolo en las puertas de las viviendas o 


en los escalones de las escaleras, con ese mismo carácter protector frente a 


los espíritus o ante posibles incendios.

El experto en cábala Gershom Scholem estudió a fondo la simbología del Sello de Salomón y su

función mágico-protectora tanto en el islam como en el judaísmo, y dedicó muchos años a rastrear sus

orígenes.
Detalle de la fachada de la catedral de Burgos, con varios "sellos" …


El uso mágico de este símbolo no termina aquí. También fue muy

utilizado en la iconografía alquímica, de modo que se encuentra en

numerosos trabajos sobre la "Gran Obra" como emblema del fuego 


y el agua.

Pero ¿cuál es la diferencia entre la estrella de David y el sello de Salomón? ¿cómo diferenciar entre la estrella de David y el sello de Salomón? pues la respuesta que sugieren es muy facil de entender. Primero ambas estrellas son la misma, son el mismo hexagrama, es decir la estrella de 6 puntas pero con la diferencia que la estrella de Salomón esta dentro de un paréntesis.

jueves, 19 de julio de 2012

LA LLAVE DE DAVID



Isaias 22:20-22: "En aquel día llamaré a mi siervo Eliaquim hijo de Hilcías, y lo vestiré de tus vestiduras, y lo ceñiré de tu talabarte, y entregaré en sus manos tu potestad; y será padre al morador de Jerusalén, y a la casa de Judá. Y pondré la llave de la casa de David sobre su hombro; y abrirá, y nadie cerrará; cerrará, y nadie abrirá."

 Apocalipsis 3:7, que dice: "Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre y ninguno cierra, y cierra y ninguno abre:..."

LOS HIJOS DE LOS PROFETAS

Samuel habría fundado lo que se conoce como "las escuelas de los profetas". Los jóvenes que recibían su educación en estas escuelas (1 Sam. 19:20) eran conocidos como los "hijos de los profetas" (2 Rey. 2:3-5).

La 1ª de tales escuelas que se mencionan estuvo en Ramá (1 Sam. 19:18, 20), la sede de Samuel (1 Sam. 7:17). Los hijos de los profetas no eran necesariamente recipientes directos del don profético, pero eran divinamente llamados, como los ministros evangélicos de hoy, para instruir a la gente acerca de la voluntad y los caminos de Dios.

Las escuelas de los profetas fueron una poderosa fuerza que limitó el avance de la marea del mal, que tan a menudo amenazó con sumergir al pueblo hebreo bajo una inundación de idolatría, materialismo e injusticia, y proporcionó una barrera contra la ola de corrupción que avanzaba con mucha rapidez.

Estas escuelas proveyeron el adiestramiento mental y espiritual a jóvenes seleccionados que serían los maestros y dirigentes de la nación. Y FUERON LA BASE DE LOS ESENIOS.

miércoles, 18 de julio de 2012

LA ORDEN CARMELITA Y LOS ORÍGENES DEL SANJUANISMO


La Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo (también llamada Orden de los Carmelitas)  surgió alrededor del Siglo XII, cuando San Bartolo y un grupo de ermitaños, inspirados en los profetas Elías y Eliseo se retiraron a vivir en el Monte Carmelo considerado el jardín de Palestina ("Karmel"significa "jardín").
 Posteriormente el movimiento esenio, de donde proviene San Juan Bautista, se inspira en los profetas Elías y Eliseo. Se concretan así los orígenes sanjuanistas de la Orden Carmelita. 

martes, 17 de julio de 2012

LAS CUEVAS CÁTARAS OCCITANAS

Los buenos hombres y las buenas mujeres, como les gustaba ser nombrados a los "perfectos", acostumbraban a utilizar algunas cuevas que encontraban por el camino para poder pasar la noche o protegerse de las inclemencias del tiempo. En algunas ocasiones, debido a la escarpada orografía del terreno, les había servido  como refugio ante las frecuentes persecuciones inquisitoriales. Hoy día pueden visitarse muchas cuevas cátaras en el sur de Francia.

lunes, 16 de julio de 2012

PADRENUESTRO CÁTARO


 La oración preferida por los cátaros consistía en repetir el Páter en lengua occitana, con las palabras "pan supersustancial" en lugar de "pan nuestro de cada día". Asimismo, meditaban cada frase.

APPARELHAMENTUM


Ceremonia que celebraban los cátaros, aproximadamente una vez al mes y que significaba "puesta a punto". Consistía en una confesión pública y pedir el perdón de Dios. En general era un acto de contrición redactado en términos generales y que hacía especial hincapié en la pereza y en la negligencia en el cumplimiento de la voluntad de Dios.

MELIORAMENTUM



Era una sencilla ceremonia cátara en la que se veneraba a los "bons hommes" (los perfectos o buenos hombres). Consistía en inclinarse tres veces ante el perfecto y decirle: " Rogad a Dios para que haga de mí un buen cristiano y me conceda una buena muerte". El perfecto bendecía al creyente y decía: "Dios haga de ti un buen cristiano y te conduzca a una buena muerte".

sábado, 14 de julio de 2012

EL TABERNÁCULO

La descripción  para un Tabernáculo, vestimentas, y objetos rituales están escritas en el Éxodo: (25-31).
El tabernáculo era un espacio rectangular de 30 codos de largo (unos 13 metros) y 10 de ancho y de altura (unos 4 metros). Tenía dos divisiones:
  • El Lugar Santo, de 20 codos de largo y contenía el candelabro de oro de siete brazos (Menorá), la mesa de los panes de la proposición u ofrenda y el altar en que quemaban los perfumes o inciensos.
  • El Sancta sanctorum o Lugar Santísimo en el que estaba el Arca de la alianza (o Arca del pacto) donde se custodiaban las reliquias del Éxodo: las Tablas de la Ley, la vara de Aarón y maná, (Epistola a los Hebreos 9:4, Santa Biblia).
Un velo precioso (con un grosor de alrededor de 10 centímetros de cuero sólido, de tal manera que si dos personas se colgaran de arriba hacia abajo en los extremos de una espada, no lo podrían cortar) suspendido de cuatro columnas de madera cubiertas de láminas de oro que separaba al Lugar Santo del Lugar Santísimo.
El espacio que rodeaba el tabernáculo se llamaba atrio. En éste, enfrente de la puerta del tabernáculo estaba el Altar de los holocaustos en que se quemaba la carne de los animales que se ofrecían por expiación de los pecados. Y había además un gran vaso o concavidad llena de agua llamada Altar de bronce en donde los sacerdotes se lavaban las manos y los pies antes de ejercer las funciones de su ministerio. Había un atrio llamado de los gentiles donde estaban los que acudían a adorar a Dios y no eran judíos o israelitas.

ORGANIZACIÓN DE LA HEREJÍA CÁTARA

Las provincias tenían cada una a su obispo, asistido por un "hijo mayor" y un "hijo menor". Antes de morir, el obispo ordenaba a su hijo mayor para que le sucediera, el hijo menor pasaba a ser hijo mayor y la asamblea de los perfectos de la región elegía un nuevo hijo menor. Cada población importante tenía un diácono, asistido por un número mayor o menor de perfectos o perfectas.
 El neófito cátaro debía ser recibido por la iglesia después de un tiempo de prueba y de la aprobación de los superiores de la comunidad. El ministro que recibe al neófito es denominado el Anciano. El sacramento se ejecuta en el momento en que el oficiante coloca el texto sobre la cabeza del postulante. Aquel y sus ayudantes le imponen las manos rogando a Dios que quiera  recibirle y enviarle el Espíritu Santo. El oficiante lee a continuación los diecisiete primeros versículos del evangelio de Juan. Desde entonces vestirá con hábito negro. En épocas de persecución puede sustituirlo por un cordón alrededor del cuello en los hombres y alrededor de la cintura en las mujeres. El diácono designará un compañero para el nuevo perfecto que era escogido entre los demás perfectos y que se convertirá en su "socius". Nunca deberá separarse de ese compañero o compañera y compartirá sus trabajos y penas.

EL ARCA DE LA ALIANZA DE ETIOPÍA



La Iglesia de Santa María de Sion se encuentra en Aksum, (Etiopía). Pertenece al Patriarcado Copto de Etiopía uno de los patriarcados de la Iglesia Copta. Según la tradición, en esta Basílica se custodia el Arca de la Alianza, que supuestamente fue depositada allí por Menelik I, hijo de Salomón. No puede ser visitada excepto por el cuidador del templo que fallece cada 2-3 años.

MISA CON EL PROBABLE SANTO GRIAL

El 8 de Noviembre de 1982 el papa Juan Pablo II celebraba misa con el muy probable auténtico Santo Grial.

Benedicto XVI también oficiaría misa con el mismo cáliz.




viernes, 13 de julio de 2012

LA PASCUA JUDÍA


   La Pascua judía
Las fiestas principales judías eran Pascua, Pentecostés y Tabernáculos, cuya celebración se basaba en acontecimientos anualmente esperados por agricultores y ganaderos, relacionados desde siempre con Dios y, más tarde, con algunos hechos salvíficos históricos. De estas tres fiestas, la de la Pascua era la más antigua e importante de Israel. Significa «paso» o «tránsito». Naturalmente, el «paso» pascual significado no es cambio de lugar, sino transformación de existencia. Es existir de un modo nuevo.
Así  para los nómadas empezaba en primavera. Florecían las primeras espigas, con cuya harina se obtenían los panes ázimos, es decir, los panes sin la levadura vieja perteneciente a la cosecha anterior. Además, coincidiendo con el florecimiento del desierto, las ovejas tienen sus crías. La noche pascual tuvo su origen en la luna llena de primavera, momento en que los pastores se despedían con una comida (cordero, hierbas amargas, pan ázimo), dispuestos a cambiar de lugar de pastos (vestido ceñido, sandalias y bastón). Precisamente cuando los judíos preparaban sus panes ázimos para ofrecerlos a Yahvé, tuvo lugar el paso del ángel del Señor para salvar a su pueblo de la esclavitud de Egipto.
La Pascua judía era celebrada desde sus orígenes con una comida. A los panes ázimos se añadió el rito del sacrificio y banquete de un cordero. Así se recordaría anualmente la pascua del Señor, la liberación del pueblo. El acontecimiento del éxodo de Israel y su salida de Egipto hacia la tierra prometida se conmemoró mediante la institución pascual o el memorial de liberación: salida hacia la libertad, final de la antigua existencia y donación de nueva vida. Celebrada por las tribus en su lugar de asentamiento, la Pascua se restringió más tarde a Jerusalén y al Templo, convertidos en lugares de peregrinación. En tiempos de Jesús, la Pascua era la fiesta más importante de los judíos. La Pascua es el «paso de Dios» para salvar a su pueblo de la esclavitud y llevarlo a la libertad. Según una tradición judía, la Pascua era asimismo aniversario de la creación.
El rito fundamental de la Pascua era la cena en familia o en fraternidad, a base de cordero (signo de la compasión de Dios), pan ázimo (miseria sufrida), hierbas amargas (esclavitud) y salsa roja (trabajos forzados en Egipto). Se conmemoraba la liberación de la servidumbre de Egipto, la alegría por la libertad adquirida y la espera de la venida salvadora del Mesías. Las muchedumbres se agolpaban en Jerusalén. Los padres de familia iban oportunamente al templo con su correspondiente cordero para ser degollado  por un sacerdote. Era noche de rebelión y de «cuchillos largos» o de espadas. Pero, sobre todo, noche de esperanza  en la liberación definitiva que llevaría a cabo el Mesías.

CAPÍTULOS TEMPLARIOS Y CEREMONIAS CÁTARAS


Existe cierta semejanza entre un capítulo templario y otro cátaro. En ambos hay carencia de figuras, excepto la espada en el Temple. En el capítulo templario  hay nueve velas rojas que recuerdan a los nueve fundadores. En el capítulo cátaro hay llamas encendidas que nos recuerdan la venida del Espíritu Santos. En ambos se reza el padrenuestro. En ambos se termina el capítulo con besos y abrazos entre los concurrentes. Sólo un detalle: nos olvidábamos de la presencia de Baphomet en el capítulo templario.

jueves, 12 de julio de 2012

Menorah


El famoso y al mismo tiempo desconocido "Menorah", el y misterioso candelabro de los siete brazos, uno de los tesoros perdidos del Templo de Salomón y una de las reliquias mas preciadas de la Historia.
 La Biblia nos deja la mas clara descripción de ese  objeto. En el Libro del Éxodo  nos lo presenta como: "...un candelabro, de oro puro...batido con su base, su tallo, sus cálices, sus globos y sus lirios saliendo de el...".
La historia nos cuenta como siguiendo las instrucciones de su Dios, Moisés decidió fundir oro en grandes cantidades y elaborar el iniciático candelabro, además del resto de los objetos ceremoniales requeridos. desde entonces la estraña y afiligranada lámpara de los siete brazos de la que nos habla la Biblia, ha venido a ser el símbolo por excelencia del pueblo judío.

miércoles, 11 de julio de 2012

ALGUNAS CREENCIAS OCCITANAS-CÁTARAS

El catarismo occitano se caracterizaba por:
-La pérdida de poder de la iglesia
-La creencia en la reencarnación.
-La negativa a comer carne
-La creencia de que toda la materia procedía del mal.
-La idea de que Dios tenía dos hijos: Satán y Jesús que competían por el poder.

martes, 10 de julio de 2012

OCCITANIA: HACIA LOS ORÍGENES DE LA HEREJÍA CÁTARA

Occitania es el nombre con el que se designa al territorio en el que tradicionalmente se ha hablado el idioma de Oc, el occitano.  También comprende un pequeñísimo territorio en el Valle de Arán, en Cataluña (único lugar en el mundo donde se considera el idioma oficial, junto al español y el catalán) y en los Valles Occitanos del Piamonte italiano.  Sobre la etimología del occitano o de la lengua de Oc han corrido ríos de tinta, pero parece que lo más probable es que proceda del occitano medieval, así su significado sería simplemente “sí”. Y otro dato importante es el hecho de actualmente los hablen aproximadamente ocho millones de personas, mientras que otros 7 millones, al menos lo comprenden. Según muchos autores, más que un idioma, es una familia de idiomas en el que confluyen el auvernense, el gascón, con el aranés, el bigorrés y el bearnés, el limosín, el languedociano, el provenzal, el vivaroalpino o provenzal alpino, el judeoprovenzal o shuadit. Pero también hay otros muchos autores que se apartan de la perspectiva francesa oficial y que postulan que todos estos no son más que dialectos de un mismo idioma. Sin embargo, sí que es destacable el hecho de que fuera precisamente el occitano el vehículo empleado para la primera poesía vernácula de Europa en la Edad Media. Tanto era así, que en la propia Divina Comedia de Dante, hay un trovador que habla en occitano. Los trovadores y los juglares empleaban esta lengua para contar y cantar sus historias. Además, fue una lengua con rango administrativo a la par que el latín.  Tras la Revolución francesas, el occitano estuvo perdido, aunque continuó siendo la lengua corriente de una gran mayoría de población, especialmente en el entorno rural del sur del país hasta bien entrado el siglo XX.
En la actualidad se experimenta una recuperación del idioma a muchos niveles, sin por ello postergar el francés de ninguna manera, pero un detalle curioso y muy simpático es el hecho de poder encontrar los nombres de las calles en ambos idiomas. Lo cual permite conocer más profundamente el verdadero significado de algunas palabras que, para los hispanohablantes nos resulta complicado comprender directamente el francés. Porque no sólo se trata de las calles, sino que éstas suelen dar nombre a barrios, a establecimientos, restaurantes, hoteles, etc.

lunes, 9 de julio de 2012

jueves, 5 de julio de 2012

LA VARA DE AARÓN


En Israel hacía falta un nuevo liderazgo urgentemente. Así que, Dios ordenó que un anciano de cada una de las doce tribus trajera una vara de madera con su nombre escrito en ella y que la dejara en el tabernáculo durante la noche. Después dijo: "Florecerá la vara del hombre que Yo escoja..." . A la mañana siguiente, la de Aarón "...había brotado, y echado flores..

miércoles, 4 de julio de 2012

EL CONTENIDO DEL ARCA DE LA ALIANZA


El contenido del arca de la alianza lo fue constituyendo el propio Dios como prueba (o recuerdo) de que su pueblo lo rechazó alguna vez.
-Es cierto que el maná salvo al pueblo de morir de hambre en el desierto, pero ellos al poco tiempo rechazaron este alimento aduciendo que cuando eran esclavos al menos comían carne, por lo que Dios pidió guardar un poco del maná en el arca como prueba de que el hombre rechazó el suministro de Dios.
-Lo mismo pasó con la vara de Aarón, ya que la gente rechazó la autoridad que Dios le dió a éste. Se tuvo que pasar una prueba en que todos los jefes de familia pusieron una vara con su nombre y al día siguiente la vara de Aarón estaba florecida y hasta con frutos. Nuevamente Dios mandó a guardar esta vara en el arca como prueba de la rebeldía contra el liderazgo de Dios.
-En cuanto a las  Tablas de la Ley, estaban  grabadas en piedra. Cuando bajó de la montaña el pueblo elegido adoraba a un falso ídolo. Moisés  rompió las Tablas.. Consiguió unas nuevas  que fueron guardardadas  en el arca como prueba de la desobediencia de su pueblo.

martes, 3 de julio de 2012

BATALLA DE BANNOCKBURN



La batalla de Bannockburn (23 y 24 de junio de 1314) fue una trascendental victoria escocesa contra los ingleses en las Guerras de independencia de Escocia.
Las tropas de Roberto Bruce se habían preparado en Bannockburn para presenciar el acuerdo de paz entre el entonces Rey inglés y su Soberano escocés. Dado que la negociación fue fallida, los escoceses cargaron sobre los campos en pos de los ingleses. En esa batalla, miles de ingleses murieron, dando una enorme victoria a Escocia, gracias a la cual también lograron su ansiada independencia. Se barajan hipótesis sobre la participación de un nutrido grupo de templarios comandados por Pierre d´Aumont, escapados de la persecución, luchando en las filas escocesas. En cualquier caso, el resultado fue que un ejército de 6.500 soldados derrotó a otro compuesto por más de 20.000.

EL REY ESCOCES QUE APOYÓ A LOS TEMPLARIOS


Bruce fue depuesto  en 1307 por el ejército de Eduardo I, y fue forzado a refugiarse en las tierras altas y más tarde en la pequeña isla de Rathlin. En su ausencia todas sus propiedades fueron confiscadas y él y sus partidarios fueron excomulgados. Sin embargo, continuó reclutando seguidores y en menos de dos años arrebató casi la totalidad de Escocia a los ingleses, a quienes derrotó de nuevo en 1314 en la batalla de Bannockburn; también invadió dos veces Inglaterra y en 1323 firmó con Eduardo II una tregua de trece años. Tras la subida al trono de Eduardo III en 1327, estalló la guerra una vez más y los escoceses triunfaron de nuevo. En 1328, ambos monarcas establecieron un tratado que reconocía la independencia de Escocia y la legitimidad de Bruce al trono.

TEMPLARIOS EN ESCOCIA

El Reino Celta de Escocia

Hacia marzo de 1309, Robert Bruce fue declarado soberano del reino celta de Escocia. También había sido excomulgado por Roma, lo cual, hacía que Bruce hiciera caso omiso de cualquier edicto o bula papal.
La Orden del Temple poseía un número considerable de preceptorías a lo largo del Sena, por lo tanto, en los meses anteriores a los arrestos pudieron haber transportado hombres, pertrechos y tesoros hasta La Rochelle, que era el centro de sus operaciones marítimas. A partir de este punto, solo quedaba una vía de escape desde la costa septentrional de Irlanda, incluyendo la desembocadura del Foyle, hasta los dominios de Bruce en Argyll, Kintyre y el estrecho de Jura, ya que el resto de las posibles rutas de escape estaban bloqueadas por ingleses y franceses.

La supervivencia templaria

A partir de la posibilidad de que una nutrida guarnición de templarios, armados y con una gran pericia militar, hayan desembarcado en estas costas escocesas, se puede deducir que congeniaron con Robert Bruce. Este hecho podría contrastar con los indicios de la misteriosa presencia de templarios entre las filas de Bruce en la batalla de Bannockburn.

lunes, 2 de julio de 2012

SAN ANTONIO ABAB Y EL HIPOTÉTICO REINO DEL PRESTE JUAN


Es evidente la conexión del reino del Preste Juan con San Pedro Abad. Un dato más de sanjuanismo. Vamos reconstruyendo, poco a poco, la ruta del sanjuanismo desde los primitivos essenios hasta la actualidad.

SAN ANTONIO ABAD Y LOS EREMITAS DEL DESIERTO


San Antonio Abad era uno de los eremitas del desierto. Es evidente su conexión con la Filocalia y el Hesicasmo. Seguimos en la ruta del sanjuanismo.

EL ÁRBOL DE LA VIDA Y LA CRUZ TAU


En sueños de un noble afectado por la enfermedad, San Antonio  ofreció su báculo en forma de la letra griega «tau» y le mandó que lo hincase en la tierra. Obedeció el noble los santos designios y vio cómo crecía súbitamente un gran árbol cuyas ramas se esparcían en todas direcciones, produciendo gran abundancia de flores y frutos, bajo los cuales se veían muchos pobres sin pies ni manos que, en presencia de tan gloriosa sombra, se recreaban y consolaban. San Antonio procedió a explicarle tal visión: “Advierte que tú has de plantar un árbol en el tronco de la piedad y en la raíz de la caridad, y este árbol extenderá sus ramas muy largamente y de sus frutos se sustentarán los pobres”

PRIMERA SIMILITUD ANTONIANOS-TEMPLE

Fue a finales del siglo IX cuando nueve caballeros franceses decidieron partir hacia Bizancio en busca del cuerpo de Antonio el Ermitaño, el anacoreta de Egipto, canonizado como san Antonio Abad

LA ORDEN ANTONIANA Y EL REINO AFRICANO DEL PRESTE JUAN



Antonianos: la orden de la TAU

Hábitos negros y cruces azules fueron, durante siglos, los distintivos de una de las órdenes religiosas más enigmáticas y desconocidas de la Cristiandad. Nacida en tierras egipcias con la finalidad de curar una extraña epidemia que asolaba la Europa medieval, esta misteriosa congregación debe su nombre a san Antonio Abad, famoso por sus visiones y tentaciones diabólicas.

Fue a finales del siglo IX cuando nueve caballeros franceses decidieron partir hacia Bizancio en busca del cuerpo de Antonio el Ermitaño, el anacoreta de Egipto, canonizado como san Antonio Abad y llamado también san Antón, que obraba en poder de los emperadores de Oriente desde que fuera milagrosamente descubierto en el desierto.

A su regreso, las reliquias fueron instaladas en la ciudad de Saint-Antoine-de-Viennois, coincidiendo con la propagación de una de las peores epidemias conocidas de la Europa medieval, el llamado ignis sacer o fuego sagrado (o santo).

Las crónicas lo describen como una extraña enfermedad cuyo síntoma característico era la gangrena de pies, piernas, brazos y manos. En los casos graves el tejido se tornaba seco y negro y las extremidades, momificadas, caían sin pérdida de sangre. Se decía que estaban consumidas por el fuego sagrado y se ennegrecían como el carbón.
En sueños de un noble afectado por la enfermedad, San Antonio  ofreció su báculo en forma de la letra griega «tau» y le mandó que lo hincase en la tierra. Obedeció el noble los santos designios y vio cómo crecía súbitamente un gran árbol cuyas ramas se esparcían en todas direcciones, produciendo gran abundancia de flores y frutos, bajo los cuales se veían muchos pobres sin pies ni manos que, en presencia de tan gloriosa sombra, se recreaban y consolaban. San Antonio procedió a explicarle tal visión: “Advierte que tú has de plantar un árbol en el tronco de la piedad y en la raíz de la caridad, y este árbol extenderá sus ramas muy largamente y de sus frutos se sustentarán los pobres”. Fue entonces cuando padre e hijo donaron sus personas y hacienda a san Antonio, cosieron en sus vestiduras la señal del báculo que les había dado el ermitaño e iniciaron la tarea encomendada: nacía así la Orden de los Caballeros de San Antonio, cuya constitución fue aprobada por Urbano II en 1095. Los primeros antonianos, vestidos con hábito negro y letra tau azul en el pecho, eran seglares hasta que, en 1218, recibieron los votos monásticos de Honorio III. Ochenta años después, en 1297, adquirieron cánones propios, adscritos a la regla de san Agustín, por parte de Bonifacio VIII. La orden se extendió por Francia, España e Italia y dio a la Iglesia numerosos eruditos y prelados, siendo los encargados de la salud dentro de la curia vaticana. Años después veía la luz un curioso opúsculo, salido de las prensas valencianas de Juan Vicente Franco con el título de Fundación, vida y regla de la grande orden militar y monástica de los caballeros y monjes del glorioso Padre San Antón Abad, en la Etiopía, monarquía del Preste Juan de las Indias. Escrito por un tal Juan de Baltazar, que se presentaba a sí mismo como caballero abisinio, relataba la existencia de una hasta entonces desconocida rama africana de la orden antoniana. Si hacemos caso de Baltazar, la Orden Militar de Caballeros Antonianos habría sido fundada en el año 370 por el emperador etíope Juan el Santo, con la intención de pelear contra los herejes arrianos que amenazaban la religión cristiana del reino de Etiopía. Inspirados en la forma de vida de san Antón Abad y seguidores de las constituciones y reglas de san Basilio, la orden se amplió y engrandeció durante el reinado del Preste Juan Felipe VII, diferenciándose en dos ramas: una de monjes, que llevaban la tau como distintivo, y otra de caballeros, que unían a la cruz una flor de lis de color azul, guarnecida por las orillas con un hilo de oro. Fue también Juan Felipe VII el encargado de imponer una ley que, aunque dura, había servido para proteger su reino católico: todos los vasallos estaban obligados a dar a la religión de san Antón uno de cada tres hijos varones que tuvieran. Esta misteriosa orden etíope tenía en cada ciudad su convento y abadía, elevándose el número de los mismos a más de 2.500. Los caballeros, una vez que envejecían, se convertían en monjes y pasaban a residir en las abadías.
En cuanto a los futuros caballeros, debían entrar en la orden a los 16 años y pasar los nueve siguientes en un noviciado bélico distribuido en tres fases, a lo largo de las cuales luchaban contra los enemigos de la fe cristiana.
La narración de Juan de Baltazar será posteriormente incorporada a la historia que de la orden antoniana escribió Blas Antonio de Ceballos. Titulada Libro nuevo. Flores sagradas de los yermos de Egipto. Vida y milagros del gran padre San Antonio Abad y sus más principales discípulos. Origen de la ilustre religión antoniana y fundación del orden militar de Caballeros de San Antonio, en los reinos de Etiopía, fue publicada en Madrid en 1686, muestra clara de la veracidad que se dio, durante todo el siglo XVII, a la existencia de una rama africana de caballeros antonianos. En la actualidad debemos creer que se trata tan sólo de un relato fantástico pues no se han encontrado pruebas que lo confirmen. Sí es verdad que existió una orden llamada de antonianos copto-etíopes, asociada con el hospicio de San Stefano dei Mori en la Ciudad del Vaticano, pero se trata tan sólo de una manera de designar al conjunto de normas que regían la actividad diaria dentro de los muros de dicho hospicio.
 La historia de los antonianos en España está directamente relacionada con el Camino de Santiago, pues Castrojeriz, pueblo emblemático del Camino a su paso por la provincia de Burgos, fue el lugar elegido para establecer el primer convento español. Fundado en 1146, bajo el patrocinio de Alfonso VII de Castilla, se transformó en la casa madre de la orden en España y en la Encomienda de Castilla. El convento, hoy en ruinas, disponía de un espléndido santuario y de un hospital donde los peregrinos encontraban alivio a las muchas dolencias ocasionadas por la dureza propia del Camino, pues la orden antoniana fue creada con fines hospitalarios, si bien su especialización estaba en la curación del “fuego sagrado”. La muerte se producía, generalmente, por parálisis respiratoria. El ergotismo crónico se debía, por su parte, al efecto producido por la vasoconstricción periférica. La falta de oxígeno en las extremidades conducía a la gangrena y posterior necrosis y amputación de los órganos afectados. Todos los aquejados de esta enfermedad presentaban, como síntoma común, la fiebre, tan elevada que quienes la soportaban describían posteriormente visiones extrañas y alucinaciones, generando así una temática específica dentro del culto a san Antonio.

domingo, 1 de julio de 2012

LAS NAVAS DE TOLOSA (ESTRATEGIA)




LAS NAVAS DE TOLOSA: EL FIN DEL PODER ALMOHADE EN LA PENÍNSULA

Corría
el año 1195 cuando cerca de la fortaleza de Alarcos las tropas castellanas de Alfonso VIII, con la caballería pesada al mando de don Diego López de Haro, unidas a los freyres de la Orden de Santiago y Calatrava sufrieron una estrepitosa derrota frente a las fuerzas almohades comandadas por el califa Abu Yaqub al-Mansur, que moriría en la refriega pero que a pesar de todo lograría conducir a sus guerreros a la victoria gracias a la agilidad y certeza de sus temibles arqueros
Agzaz.
Alfonso VIII de Castilla

Después de Alarcos Castilla no tenía nada que oponer a la furia africana. Los almohades asaltaron la plaza fuerte de Calatrava, cuya guarnición pasaron a cuchillo, y alcanzaron en sus correrías hasta las puertas de Toledo y Madrid. La línea del Tajo apenas podía contenerlos. Sin embargo el prolongado esfuerzo de uno y otro bando y los aconteceres de la política interior del imperio almohade aconsejaron pactar. En 1197 Castilla y el Miramamolín (en árabe Amir ul-Muslimin, o "Principe de los Creyentes", era el título oficial de los califas almohades) concertaron una tregua de diez años.

Durante este período Alfonso VIII se ocupó de ajustar cuentas pendientes con el rey Sancho el Fuerte de Navarra, su ancestral enemigo que amenazaba las fronteras septentrionales del reino de Castilla para intentar ampliar su cada vez más rentringido territorio y a quien Alfonso (libre temporalmente de la amenaza almohade) obligó finalmente a firmar la paz. De esta manera, durante los primeros años del siglo XIII el rey de Castilla va a vivir una tensa calma durante la cual estrecha sus lazos de amistad con el vecino reino de Aragón, rumia la venganza de Alarcos contra el Miramamolín almohade y teme, sobre todo, un ataque combinado de navarros y leoneses (por entonces el reino de León estaba separado del de Castilla y gobernado por Alfonso IX) si concentra sus tropas en el Sur...
Para conjurar estos temores Alfonso necesitaba una bula papal que declarase la Cruzada contra los almohades, cosa que consiguió del papa Inocencio III (notable protagonista de esta época, al que veremos intervenir en siguientes ocasiones)  ordenando a los reyes cristianos que aplazaran sus discordias personales en favor de la magna empresa común y amenazando con excomulgar a quien atacase al reino de Castilla mientras su tropas marchasen contra los infieles. Convocada, pues, la Cruzada contra los almohades, los reyes de León y Navarra nada pudieron hacer contra Alfonso de Castilla, y aún el rey Sancho el Fuerte prometió a regañadientes prestar su ayuda al castellano en la gran confrontación que se preparaba.
Porque al mismo tiempo los almohades iban moviendo también sus piezas. En 1211 el Miramamolín Muhammad an-Nasir, un joven de treinta años rubio, de ojos azules, tartamudo, inteligente, avaro e hijo del califa muerto en Alarcos, llegaba a la península desde Marrakech, al frente de un ejército descomunal (las crónicas hablan de más de 100.000 hombres), dispuesto a doblegar a los cristianos de una vez por todas. Tras asediar y tomar la fortaleza de Salvatierra, regresó a Sevilla e intensificó los preparativos guerreros. Aún pasaría un año, no obstante, antes de llevarse a cabo la gran batalla que ya se anunciaba, tiempo durante el cual Alfonso VIII de Castilla llegó a hacer incursiones incluso por Levante y perdió a su joven hijo, el príncipe Enrique I, en un accidente fortuito a los doce años, lo cual le llenó de tristeza e hizo que concentrase aún más sus esfuerzos en la campaña contra los musulmanes.
La Cruzada convocada por Inocencio III atrajo en la primavera de 1212 a decenas de miles de aventureros, caballeros de fortuna y nobles de toda ralea y estirpe que conforme se iban aproximando a Toledo (lugar de concentración de las tropas cristianas) cometían asaltos, tropelías y abusos sin cuento sobre la población castellana, llegando incluso a asaltar la judería toledana, causando miles de víctimas. Al frente de los cruzados ultramontanos se encontraba el fanático arzobispo de Narbona, Arnault Amauric, otro protagonista al que también veremos actuar en Occitania al año siguiente. Y entre los numerosos caballeros ultrapirenaicos llegados al llamamiento de la Cruzada encontraremos también al conde Raimundo VI de Tolosa, que acompañará a su cuñado el rey don Pedro II el Católico de Aragón y sus respectivas mesnadas, que serían precisamente los primeros contingentes en acudir al encuentro de los castellanos en Toledo. El último en llegar sería Sancho de Navarra, con un pequeño pero bien entrenado y aguerrido contingente de caballeros.
Partidos los cristianos de la ciudad del Tajo, se dirigieron hacia el sur al encuentro de los almohades, pero tras los desmanes producidos por los cruzados en Malagón, el pacto establecido entre Alfonso VIII y el alcaide de la fortaleza musulmana de Calatrava prometiendo protección a los pobladores frente a la soldadesca extranjera indignó a los ultramontanos, que abandonaron en masa al ejército cristiano para regresar a Francia o seguir cometiendo tropelías por tierras castellanas, todo ello a pesar de las reconvenciones, amenazas e insultos del arzobispo Amauric. Finalmente las tropas castellanas, navarras, aragonesas y los escasos ultramontanos que restaban en las filas cristianas alcanzaron los pasos de Sierra Morena, que habían sido convenientemente ocupados y controlados por las fuerzas del Miramamolín, haciendo imposible el acceso al Valle del Guadalquivir.
El abad cisterciense y arzobispo de Narbona Arnaud Amaury

Los cristianos necesitaban un milagro y el milagro ocurrió. Al menos eso sostiene la tradición. Ante Alfonso VIII se presentó un pastor que decía conocer un paso seguro que los almohades no vigilaban. Nada se perdía con probar. Don Diego López de Haro y un destacamento de exploradores acompañaron al rústico que los llevó primero hacia el oeste y luego hacia el sur, a través de los actuales parajes del Puerto del Rey y Salto del Fraile. Así fueron a salir, esquivando los relieves más comprometidos de aquellas montañas, a la explanada de la Mesa del Rey, donde se establecieron. Don Diego López de Haro comunicó al rey que el paso del pastor era perfecto, justamente lo que necesitaban. En cuanto amaneció el día siguiente, el grueso del ejército levantó el campamento y fue a acampar en la Mesa del Rey.
Por fin se encontraban los dos inmensos ejércitos frente a frente sin obstáculo natural que los separase. Perdida su ventaja inicial, Al-Nasir decidió plantear la batalla lo antes posible para evitar que los cansados cristianos y sus caballos se repusieran de las fatigas de la caminata. Formó pues a su ejército en orden de combate, se situó favorablemente sobre el terreno y envió columnas de caballería y arqueros para que hostigaran a los cristianos en sus posiciones. Pero los reyes cristianos no mordieron el anzuelo y la actividad bélica de la jornada se redujo a pequeñas escaramuzas sin importancia.

Al día siguiente, domingo, 15 de Julio los almohades amanecieron formados en orden de combate y se mantuvieron de esta guisa hasta mediodía, pero los cristianos eludieron nuevamente el encuentro y se contentaron con escaramuzar. Los adalides de uno y otro bando analizaban la fuerza y disposición del adversario y tomaban las medidas oportunas para asegurarse la mejor fortuna en la batalla campal que se avecinaba.
Pocos conseguirían conciliar el sueño en los campamentos de las Navas la noche del día 15 de Julio de 1212. Unos y otros contemplarían el parpadeo de las luces del campamento enemigo mientras esperaban impacientes la amanecida del día decisivo. Todavía era de noche cuando en el campamento cristiano circuló la orden de prepararse para el combate. Pasaron los clérigos administrando la absolución a los cruzados que aprestaban arreos y armas.

Cuando clareo el día ya se habían desplegado las fuerzas. En el campo cristiano tres cuerpos de ejército dispuestos en línea ocupaban la llanura. El central estaba formado por las tropas de Castilla; a su izquierda, las de Aragón con Pedro II al frente y a la derecha los navarros de Sancho el Fuerte. Las dos alas habían sido forzadas con tropas de varios concejos castellanos. Cada uno de estos cuerpos estaba a su vez dividido en tres líneas ordenadas en profundidad.

La vanguardia del cuerpo central, que sería el eje de la lucha, iba mandada por el veterano don Diego López de Haro. En la segunda línea se ordenaban los caballeros templarios, al mando del Maestre de la Orden, Gómez Ramírez; los caballeros hospitalarios, los Santiaguistas de Uclés y los de Calatrava
En la retaguardia iba Alfonso VIII acompañado por el arzobispo de Toledo don Rodrigo Ximénez de Rada y otra media docena de obispos castellanos y aragoneses y probablemente también por el arzobispo de Narbona. Los nobles caballeros y freires de las órdenes militares eran guerreros profesionales y se hacían acompañar de peones y servidores igualmente experimentados, pero a las tropas de los concejos, aportadas por las ciudades castellanas, les faltaba experiencia guerrera y entrenamiento. Por eso se había dispuesto que combatieran mezcladas con las tropas profesionales. De este modo la calidad sería más homogénea y la infantería y la caballería se prestarían mutuo apoyo.

El ejército almohade presentaba también tres cuerpos: en el primero un núcleo de tropas ligeras; en el segundo, el heterogéneo conjunto del ejército integrado por voluntarios de todo el dilatado imperio, incluyendo a los contingentes de al-Andalus; en la retaguardia, los almohades propiamente dichos ocupando la ladera del cerro de los Olivares en cuya cima Al-Nasir había plantado su emblemática tienda roja, en el centro de una fortificación de campaña construida por una amplia empalizada de troncos unidos y reforzados por cadenas. Este ingenio desempeñaba el papel de las alambradas en la guerra moderna. Defendía la empalizada una nutrida guardia de voluntarios armados de picas, arcos y hondas. Es de notar que muchos de éstos estaban atados por los muslos y enterrados hasta las rodillas. Eran los fanáticos imesebehlem ("desposados") de Al-Nasir que, sentado sobre su escudo a la puerta de la tienda, leía el Corán e impetraba la protección de Alá en el apurado trance de aquella batalla decisiva
Conviene decir unas palabras a propósito de este extraño y legendario contingente de guerreros. Los componentes de la guardia del palenque no eran, como sostiene la tradición historiográfica cristiana, desgraciados esclavos negros encadenados unos con otros para evitar su huida y obligados a combatir hasta la muerte. Más probablemente se trataba de fanáticos voluntarios que, ligados por un juramento, ofrecían sus vidas en defensa del Islam y se hacían atar por las rodillas para asegurarse de que se sacrificarían llegado el caso. La de los imesebehlem es una institución que ha perdurado hasta nuestros días. Escribe Huici: "Los franceses han sido muchas veces testigos de su valor en las campañas argelinas. En 1854 dos columnas francesas penetraron en la Gran Cabilia y encontraron soldados desnudos hasta la cintura, vestidos tan sólo con un calzón corto y atados unos a otros por las rodillas para no huir: eran los imesebehlem a quienes había que rematar a bayonetazos sin conseguir que se rindiesen"

Pero entonces... ¿Cuantos combatientes se enfrentaron en las Navas de Tolosa? Los cronistas árabes hablan de seiscientos mil guerreros musulmanes y de una innumerable muchedumbre de cristianos. Los cristianos se refieren a casi doscientos mil jinetes musulmanes y la consabida infinita muchedumbre de peones. Modernos estudiosos de la batalla cifran los efectivos almohades entre 100.000 y 150.000 combatientes (probablemente el primer número se más exacto que el segundo) y los cristianos entre 60.000 y 80.000. Incluso admitiendo las cifras más modestas, hemos de reconocer que el choque debió ser de los más espectaculares y sangrientos de la historia medieval

En general puede decirse que los cristianos estaban mejor armados que los musulmanes, especialmente en lo tocante a armamento defensivo: escudos, cotas de malla y yelmos de metal o cuero. El ofensivo abarcaba una amplia panoplia: lanza, espada, cuchillo, maza o hacha, alabarda, arco y honda. Por la parte almohade el armamento defensivo se limitaba prácticamente al escudo. Sus peones iban provistos de lanzas y espadas, azagayas, arcos y hondas. El predominio de las armas arrojadizas en el campo musulmán se refleja en las enormes reservas de flechas y venablos que cayeron en manos de los cristianos. El arzobispo de Narbona calculó que dos mil acémilas no serían suficientes para transportar las cajas de flechas encontradas.

La táctica empleada por los ejércitos almohade y cristiano se basaba en concepciones del arte militar diametralmente opuestas y ambas igualmente eficaces. Por la parte cristiana, Alfonso VIII había tenido mucho tiempo para meditar sobre las enseñanzas de Alarcos. Además conocería las contramedidas que los cruzados habían desarrollado en Siria y Palestina para hacer frente a similares tácticas musulmanas. Frente al formidable bloque de la caballería cristiana que cargaba frontalmente en compacta formación, los musulmanes oponían tropas ligeras capaces de dispersarse ágilmente en todas direcciones, hurtando el blanco a la acometida enemiga, para luego agruparse y desplazándose rápidamente, envolver el enemigo y devolver el golpe en sus puntos vulnerables, la retaguardia y los flancos. Algo parecido ocurrió en Alarcos: los almohades desorganizaron las tropas de los concejos que formaban las alas del ejército castellano y rodearon al núcleo de la caballería atacándolo por los lados. Por eso, en las Navas, Alfonso VIII dispuso que los concejos combatieran mezclados con guerreros profesionales, freires o caballeros. Además reforzó convenientemente los bordes exteriores de las alas. Hemos de pensar, en definitiva, que en Las Navas de Tolosa se enfrentaron la agilidad y la destreza musulmanas frente a la potencia y la contundencia cristianas, dando como resultado la victoria de estas últimas.