El eje de la rueda
Cuando el Buda estaba sentado bajo un árbol vio dos cosas.
- Primero vio una gran rueda que abarcaba la existencia condicionada en su totalidad y contenía a todos los seres. Vio que ésta se encuentra girando constantemente, día y noche, vida tras vida, época tras época.
- En el eje de esta rueda observó tres criaturas: un gallo rojo que picotea golosamente la tierra, una serpiente verde con los ojos rojos brillando de ira y un cerdo negro que se revuelca en el lodo de manera inconsciente. Las tres criaturas forman un círculo y cada una está mordiéndole la cola a la figura que tiene enfrente.
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