COMPLEJO DE CUEVAS E IMAGEN DE LA VIRGEN NEGRA DE BRIHUEGA
También en Brihuega ejerció el clérigo liberal José María Moralejo que intentó reinstaurar la Orden del Temple en España. En 1846 escribió "Bases para el establecimiento en España de la Sociedad Militar y Benemérita del Temple". Al parecer era íntimo amigo del General Riego. Sufrió el exilio y contactó con Fabré Pallabrat. Fue, igualmente, catedrático de teología y profesor de sordomudos. Sus planteamientos eran radicales.
Yesería mudéjar del Castillo de la Piedra Bermeja de Brihuega. Se ven varios corazones entrelazados. Es muy similar al que se encuentra en la Ermita de San Bartolomé en Soria.
En Brihuega son seis corazones. En Soria seis. Dentro de la figura se dibuja una estrella de cinco puntas. Aquí es de seis puntas. Los corazones eran típicos de los mulmanes sufíes pero fue una simbología adoptada por el Temple.
En este ambiente debió formase la ideología templaria de D. José María Moralejo, párroco de Brihuega que también perteneció a una sociedad secreta llamada "Los Comuneros".
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